En su libro El Licenciado (Harper Collins, 2023), el periodista J. Jesús Lemus realiza una investigación sobre las relaciones que Genaro García Luna mantuvo durante dos sexenios con los principales capos del narcotráfico en México, pero también analiza sus nexos con los más prominentes empresarios de este país que lo encumbraron como servidor público. 

Por Sergio Ramos.

J. Jesús Lemus deja claro que el encumbramiento del llamado “superpolicía” no pudo haber sido posible sin el respaldo que desde el inicio de su carrera le ofrecieron los grandes empresarios de México.

Fueron ellos quienes lo recomendaron con los expresidentes Zedillo, Fox y Calderón, en cuyos sexenios García Luna se hizo con el control absoluto de la policía y los sistemas de espionaje, los cuales puso al servicio del cártel de Sinaloa.

 



De Primera Noticias: ¿Cómo es que un personaje como Genaro García Luna logró ascender tantos peldaños en el servicio público mexicano?

J. Jesús Lemus: Hay que recordar una cosa: Genaro García Luna (GGL) es un personaje muy astuto y muy inteligente. No siempre se ve eso en el servicio público mexicano. GGL se corrompió con el narco hasta que se volvió un funcionario de peso en la administración pública federal. Como funcionario de segundo o tercer nivel, era un personaje honesto que se dedicaba bien a su trabajo y que, hay que decirlo, fue un buen policía. Pero para llegar a ser un servidor público de primer nivel antes tuvo que aliarse con tres poderes fácticos que son fundamentales para quienes aspiran a la política en México. Primero logró congraciarse con los grupos empresariales encabezados por Carlos Slim o Alfredo Harp Helú. Cuando Ernesto Zedillo llega a la Presidencia [1 de diciembre de 1994], estos empresarios lo comienzan a promover como un representante de los intereses de los grupos potentados. Por eso Zedillo ve en este personaje a un potencial aliado del gobierno ya que representaba los intereses de la iniciativa privada y de algunos grupos políticos. Y eso fue lo que hizo que GGL creciera de manera importante. Después vino la alianza de GGL con el crimen organizado. El primer socio criminal de GGL fue Alcides Magaña, alias “El Metro”, operador de Amado Carrillo Fuentes. De esta manera se catapulta la carrera de GGN valiéndose de estos tres pilares: el narcotráfico, la política y los empresarios.

Me gustaría profundizar más en este último aspecto. El papel que jugaron los grandes empresarios, la cúpula oligárquica de este país, en el ascenso de GGL. Mencionas a Slim y Harp Helú, pero también están Salinas Pliego, Alberto Bailleres, Eduardo Margolis, etc.

La relación de GGL con los empresarios inició a partir del secuestro de Alfredo Harp Helú en 1994. Cuando se supo del secuestro de este banquero, los empresarios fueron a Los Pinos a reunirse con el presidente Carlos Salinas de Gortari para expresarle su reclamo y su enojo porque uno de los suyos había sido secuestrado. Eso prendió las alertas y es cuando Salinas pone a trabajar al CISEN para que investigue el caso. El almirante Villanueva le asigna el caso a GGL. Y GGL lo investiga no por sus propios medios, sino porque ya siendo funcionario empieza a tener contacto con “El Metro”, quien le ayuda a desentrañar todo el caso. Fue este criminal quien le ofreció a GGL toda la información relacionada con los grupos que habían secuestrado al empresario. De esa manera dan con el paradero de Harp Helú. GGL capitaliza el caso y presenta el trabajo de investigación como suyo. Y ahí es cuando la iniciativa privada aplaude porque GGL logró el rescate, salvó la vida de Harp Helú y llevó a la cárcel a miembros de la guerrilla de Guerrero que lo tenian secuestrado. Esto hace que los empresarios volteen a verlo y aplaudan su trabajo. Por eso, cuando Ernesto Zedillo llega a la Presidencia, los empresarios encabezados por Slim y el propio Harp Helú le piden al presidente que lo coloque en un puesto importante. Zedillo crea la Policía Federal Preventiva (PFP), dependiente de la Secretaría de Gobernación, para que GGL quede al frente como coordinador. Lo que realmente hizo GGL fue poner esta policía a disposición de los grandes empresarios. Con elementos de la PFP integró guardias de seguridad y escoltas personales para las familias de los empresarios. Entonces la PFP pasó de ser una organización policial pública a convertirse en una policía privada al servicio de los empresarios.  Así fue como les comenzó a poner seguridad en las minas, en oficinas, en petroleras… las antenas de comunicaciones… Telmex… en todo lo que tenía que ver con el sector industrial poderoso de aquel tiempo, ahí estaban elementos de la PFP que este señor les estaba entregando como en subvención. Por eso lo empresarios lo comenzaron a respaldar, porque él estaba  viendo por la seguridad de ese sector. Y ahí es cuando nace la relacion con otros potentados como Eduardo Margolis, Ricardo Salinas Pliego, Alberto Bailleres, Germán Larrea. Todo mundo quería ser amigo de GGL, porque siendo amigo de él tenían la posibilidad de tener seguridad privada con cargo al erario público.

A partir de qué momento se da la relación entre García Luna y el Cártel de Sinaloa.

La relación de GGL con el Cártel de Sinaloa surge en el sexenio de Vicente Fox. A petición de los empresarios, Fox mantiene en el área de seguridad a GGL. Y ahí es cuando comienza a tener contacto con los distintos directores de los CEFERESOS. El conecte de GGL con el Cártel de Sinaloa fue a través de Dámaso López Núñez, El Licenciado, quien en aquel tiempo era el director de seguridad de Puente Grande, donde estaba encerrado el Chapo Guzmán. El Chapo empieza a contactar con El Licenciado para que lo deje libre. Y El Licenciado se pone en contacto con GGL para hablarle del planteamiento del Chapo para que lo saquen de la cárcel, para que lo dejen fugarse. Y por supuesto que se hace el trato. Después de eso, “El Rey” Zambada visita a GGL por indicaciones del Chapo Guzmán para que le pagara por el favor. Ahí es cuando comienza la verdadera relación de GGL con el narcotráfico.

El actual fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero, fue secretario de Seguridad Pública en el gobierno de Vicente Fox. Por lo tanto, Genaro García Luna era uno de sus subordinados. ¿Se podría incluir a Gertz Manero entre los funcionarios responsables de esa primera fuga del Chapo Guzmán?

GGL no organizó solo el operativo para permitir la fuga del Chapo Guzmán. Tenía que dar parte de qué iba a hacer y para esto se tuvo que haber informado al secretario de Seguridad Pública, Alejandro Gertz Manero, y también al jefe de la oficina de la Presidencia, que era Alfonso Durazo Montaño y ahora es gobernador de Sonora. Entonces estos dos personajes que están en el gobierno de la Cuarta Transformación fueron también partícipes de la relaciones de GGL con el narcotráfico.

Sergio Villarreal Barragán se convirtió en uno de los principales testigos en el juicio contra Genaro García Luna. Y tu lo conociste en el penal de Puente Grande, Jalisco. ¿Qué fue lo que dijo sobre los nexos de Felipe Calderón y GGL con el Cártel de Sinaloa ?

En el 2010 conocía a Villarreal Barragán en Puente Grande. Ahí llegamos a platicar justamente de esas relaciones que tenía. Él decía que tenía relaciones con el secretario de Seguridad. El presumía que tenía esas relaciones con GGL. Y aparte decía que conocía muy bien al presidente e incluso platicó que estuvieron en una ocasión en una comida en la que Margarita Zavala y Felipe Calderón bautizaron a una hija del ex senador Guillermo Anaya. En esa fiesta estuvo El Grande. Él llegó a la fiesta por invitación de Anaya, porque este tenía una hermana, y esa hermana estaba casada con un hermano de El Grande, una persona de nombre Hernán Villarreal. Entonces a través de su hermano Hernán, El Grande llegó a esa fiesta donde comió con Felipe Calderón, platicaron y se puso a sus órdenes. Él presumía mucho la amistad con GGL.

¿Tu ves una doble moral en el gobierno de Estados Unidos que primero encumbró a GGL y ahora lo enjuició por distintos delitos?

Yo no veo que sea doble moral de Estados Unidos el hecho de que encumbraron, respaldaron y protegieron a GGL y ahora lo enjuiciaron. Yo pienso que la molestia de EUA es justamente por eso: porque GGL pudo engañar muy bien a EUA y hacerle creer que estaba combatiendo al narcotráfico cuando en realidad estaba aliado con el narcotrafico. Supo hacer muy bien su papel y pienso que esa es la molestia del gobierno norteamericano. Hay que recordar que el gobierno de EUA le dio capacitación. Y si desde entonces EUA hubiera sabido o sospechado de la posible relación de GGL con el narcotráfico no le hubieran dado cursos de capacitación y actualizacion los del FBI, DEA o CIA. Por supuesto que no. Lo hubieran dejado aislado y que solito se acabara. Pero lo capacitaron porque pensaban que era un policía honesto que estaba combatiendo al narco. Sin embargo, nunca se imaginaron que estaban siendo engañados. Por eso es la molestia de EUA. Yo veo un decuido del gobierno americano que se tragaron la imagen que les daba GGL y hoy por eso, por salvar su dignidad, hicieron ese juicio allá.

En un punto de tu libro señalas que incluso Felipe Calderón llegó a verse como un subordinado de Genaro García Luna.

Todo el gabinete sabía que el presidente Felipe Calderon por su personalidad opaca, chiquita, pues simplemente no podía hacer nada frente a la absorvente y controladora presencia de GGL. No podía enfrentarse con él y por eso en un momento determinado se pudo imponer García Luna sobre las decisiones presidenciales. Y entonces hubo momentos en que efectivamente el que tomaba decisiones en muchos aspectos era GGL. Pero esto no exonera a Calderón porque él era el presidente.

¿Qué opinas de que algunos de estos personajes que fueron cercanos a García Luna como Omar García Harfuch o el propio fiscal Alejandro Gertz Manero sigan como funcionarios de primer nivel en los gobiernos de la cuarta transformación?

Esto nos dice que sigue persistiendo la impunidad y la corrupción. Hay que reconocer que este gobierno sí ha tenido grandes avances en materia social y de atención a los más necesitados. Pero no está cumpliendo como se prometió en el combate a la delincuencia, a la impunidad o a la corrupción. Y el hecho de que haya funcionarios dentro del actual gobierno que fueron del equipo de GGL no habla de otra cosa de que sigue siendo la misma clase gobernante. Es mentira que la actual clase gobernante haya roto con el pasado y que sean distintos a los demás. Es lo mismo. Prueba de eso es que quienes estuvieron Fox hoy están con López Obrador. Los que estuvieron con Peña Nieto o con Calderón siguen en la administración. Cualquier funcionario que veas en el actual gobierno, la mayoría, ya estuvieron en los pasados gobiernos. Esta cuarta transformación en realidad es la misma clase político de los otros que han gobernado el país.