Desde antes de llegar al Gobierno del Estado, siendo presidente del Supremo Tribunal de Justicia de Sinaloa, Enrique Inzunza Cázarez usó de manera patrimonial al ente público para colocar a familiares que con el transcurso de los años se han vuelto miembros de la élite de este poder judicial sinaloense. Al menos 22 familiares laboran no sólo aquí, sino que además también desde que llegó a la Secretaría General, comenzó a volver natural el nepotismo, una palabra que ha cobrado una carta de naturalización estatizada dentro del rochismo político.

Por Redacción Deprimera Noticias.

La lista de familiares de Enrique Inzunza Cázarez, el prospecto al Senado de la República por parte del gobernador Rubén Rocha Moya, se ha venido engrosando desde que se convirtió en el segundo al mando de la administración pública, con una voracidad que tiene en la mira incluso hasta el naciente municipio de Eldorado, al imponer a una sobrina en el Comité fundacional.

En el Supremo Tribunal de Justicia del Estado de Sinaloa, donde Inzunza Cázarez dejó a su compadre Jesús Iván Chávez Rangel, también benefició a su hermano Javier Inzunza Cázarez, a quien siendo presidente le dio la dirección administrativa del Centro de Justicia en Angostura, pero una vez que se jubiló de manera perniciosa, a su compadre lo colocó en el Centro de Justicia de Culiacán.

Otra hermana es Aída Inzunza Cázarez, quien fue puesta de magistrada del Tribunal Estatal Electoral cuando todavía Enrique detentaba el poder en el STJES.

A ellos le une ahora en el gobierno su hermano Santiago Inzunza Cázarez, actual director del COBAES, y quien supuestamente quedará de secretario de Educación Pública cuando Graciela Domínguez renuncie para irse de candidata a diputada federal.

LA ESPOSA Y LOS SOBRINOS

A la lista se une su esposa Claudia Yuridia Meza Avendaño, quien se vio beneficiada con el poder de Enrique luego de que se convirtió en magistrada del Poder Judicial de Sinaloa, dos semanas después de que Rocha Moya tomara el poder en el estado, en noviembre de 2021.

Meza Avendaño llegó a la magistratura cuando su esposo era presidente del Supremo Tribunal en 2021, por lo que a partir de ese año comenzó a tener un sueldo mensual de 150 mil pesos, cantidad más grande que el sueldo del presidente Andrés Manuel López Obrador.

La lista de parientes crece con Carlos Mario Inzunza Romero, sobrino de Enrique, quien cobra como maestro de música de la Universidad Autónoma de Sinaloa, situación que no contraviene a la Ley.

Además, Carlos Mario también aparece como afiliado al Partido Sinaloense tal y como su tío Santiago Inzunza Cázares, quien después de ayudar a Cuén Ojeda a fundar el partido, ahora reniega de esta pertenencia política.

Sin embargo, Carlos Mario aparece en la nómina de la Dirección de Gobierno, dependencia que está a cargo de Enrique en su calidad de secretario de Gobierno.

Otro nombre que salta a la vista es el de Emilio Cázares Valdez, sobrino que fue ubicado como jefe de la Unidad de Contabilidad de la Dirección de Finanzas del Supremo Tribunal.

En 2020, siendo su tío presidente, cobraba 24 mil pesos en esta unidad contable. En 2021 se le asignó un automóvil Nissan March con un precio de mercado de 240 mil pesos.

En el oficio en donde se le dio el nombramiento de jefe de la Unidad, viene la fecha del 13 de diciembre de 2019 y dicho puesto se lo firmó su propio tío Enrique Inzunza Cázares en su calidad de presidente del STJES.

En la nómina también aparece su sobrina Ivana Guadalupe Cázares Rodríguez, quien forma parte del Centro de Mecanismo Alternativo de Solución.

Emanado de la línea Cázares se encuentra además Enrique René Corral Cázares, sobrino que trabaja como perito dictaminador dentro del Poder Judicial.

En el listado de nómina, como peritos aparecen toda una fauna de sobrinos, como Karla Valenzuela Cázares, Jesús Enrique Cázares Cuén, Mario Antonio Inzunza Montoya, Aarón Inzunza Ortiz, César Daniel Pérez Cázares y por último Saúl Rodríguez Inzunza. 

Aunque toda esta situación de su red nepotismo, denuncias por acoso y jubilaciones ilegales han sido denunciada en medios de comunicación, nunca ha ameritado ninguna investigación por parte del Tribunal del Gobierno de Rocha, quienes ahora arropan a Enrique Inzunza para tener un escaño en el Senado de la República.