La influenza (gripe) y la COVID-19 son enfermedades respiratorias contagiosas que se están propagando con mayor facilidad en el invierno. Ambas comparte muchas características, pero al ser provocadas por virus diferentes, hay ciertas diferencias clave entre las dos.

De acuerdo con el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), algunas de las similituds entre ambas son fiebre o escalofríos, tos, dificultad para respirar, fatiga o cansancio, dolor de garganta, mucosidad nasal o nariz tapada.

Algunas personas pueden tener vómitos y diarrea, aunque esto es más común en los niños que en los adultos. Sin embargo, debido a la similitud de síntomas entre ambas enfermedades, es necesario realizar una prueba de detección para ayudar a confirmar el diagnostico y comenzar a recibir el tratamient correcto.

En ambos casos es posible propagar el virus al menos un día antes de experimentar algún síntoma. Ambos virus pueden propagarse de persona a persona cuando hay contacto cercano entre sí. Ambas enfermedades se propagan principalmente a través de las gotitas que van por el aire cuando la persona enferma tose, estornuda o habla.

Tanto la COVID-19 como la influenza pueden provocar enfermedades graves y complicaciones como neumonía, insuficiencia respiratoria, lesión cardiaca, insuficiencia multiorgánica, agravamiento de enfermedades crónicas, inflamación del corazón, cerebro y tejidos musculares e infecciones bacterianas secundarias.

Las principales diferencias es que la influenza es causada por el virus de influenza tipo A, B, O C, mientras que la COVID-19 es causada por el SARS-CoV-2. La COVID-19 puede causar pérdida del olfato o gusto y los síntomas se presentan después de 5 días de haber sido infectadas. En el caso de la Influenza, los síntomas se presentan de uno a 4 días después de contraer la infección.

La COVID-19 puede propagarse más rápida y fácilmente a muchísimas personas y provocar la propagación continua. Si una persona tiene COVID-19, podría ser contagiosa por un periodo más prolongado que si tuviera influenza

El riesgo de complicaciones en niños sanos es mayor en el caso de la influenza en comparación con la COVID-19. No obstante, los bebés y niños con enfermedades subyacentes tienen un mayor riesgo de contraer tanto influenza como COVID-19.

Sin complicaciones, la mayoría de las personas que contraen Influenza se recuperarán en un periodo menor de dos semanas. La COVID-19 puede presentar complicaciones graves y su tiempo de recuperación puede ser mayor al de la Influenza.

La mejor forma de prevenir la infección es evitar exponernos a ambos virus. Si su niño o niña está enfermo o presenta síntomas debe quedarse en casa, acudir al médico y no ir a la guardería. Todas las personas de 6 meses en adelante deben vacunarse contra la influenza anualmente para mantenerse sanos.