Sergio Torres Félix, secretario de Pesca del Gobierno del Estado, lanza toda la artillería política contra el dirigente estatal del PRI, Jesús Valdés Palazuelos, al percibir que éste es la carta que Quirino Ordaz Coppel guarda para jugarla en el momento que decida quién lo sucederá en el cargo a partir del primero de noviembre de 2021. Antes mancuerna inseparable en el activismo priista, los dos personajes disputan el “dedazo” desde posiciones privilegiadas: uno con recursos públicos y otro desde las siglas tricolor.

Por Redacción De Primera Noticias.

Piso parejo es lo que pide Sergio Torres Félix mientras él anda con la gran ventaja de hacer campaña desde su cargo en el Gabinete estatal, con recursos públicos, posición ventajosa que lo anima a amenazar con abandonar el Partido Revolucionario Institucional si no es el favorecido e irse a otro partido, no sin antes provocar la división en el PRI que originaría que perdiera la votación del 6 de junio de 2021.

El cálculo de Sergio Torres consiste en repetir lo que hizo Mario López Valdez en 2010 al brincarse las trancas priistas y conseguir que el Partido Acción Nacional lo postulara a gobernador y ganara la elección. En eso anda: convenciendo al PAN de que puede repetir aquella hazaña al dar por hecho que un segmento importante de militantes del PRI lo seguirá.

Pero antes llevará a cabo la estrategia para tumbar a Jesús Valdés de la posible postulación del PRI que, cree “El Morrín”, ya la tiene cocinada Quirino Ordaz para soltarla una vez que se publique la convocatoria local para el proceso electoral cada vez más cercano. “Presiona, chantajea, enseña tus números y haz hasta lo imposible por ser tú el abanderado tricolor, y lo de salirte de tu partido que sea la última opción”, le dicen sus asesores.

Esa es la razón por la que le ha lanzado en las últimas semanas cañonazos al proyecto de Jesús Valdés. A principios de marzo, en plena crisis sanitaria, soltó el primer impacto cuando al ser entrevistado en Mazatlán dio a conocer que “el nombre de Sergio Torres aparecerá en las boletas de 2021 con el PRI, sin el PRI, a pesar del PRI y a pesar de la dirigencia del PRI”.

Esta advertencia fue interpretada como declaración de guerra tanto al partido como al gobernador Quirino Ordaz Coppel. De acuerdo a actores cercanos al despacho del tercer piso del palacio de gobierno, el mandatario y Jesús Valdés cruzaron comentarios y el primero lo minimizó diciendo que Torres lo que realmente quiere es una tajada del pastel a repartir en los comicios en puerta, mientras que el líder priista lo asumió como una luz de alerta en el propósito de mantener la unidad en se necesita para retener la titularidad del Ejecutivo Estatal.

Torres se movía por todo el estado utilizando el presupuesto de la Secretaría de Pesca y repartía despensas no sólo a pescadores sino en colonias populares y lo hacía de manera personal asumiendo el discurso de estar al lado de los más pobres, pero ninguna autoridad gubernamental o electoral le ha reclamado esos actos de campaña anticipada.

Al moverse Torres literalmente como “pez en el agua”, al gobernador le convenía en la estrategia de traer a varios aspirantes a candidaturas haciendo labor de empatía con la población llevando las marcas del PRI y del “Puro Sinaloa”. Pero luego Quirino Ordaz y Jesús Valdés se incomodaron porque el ex alcalde de Culiacán que fue acusado de realizar el Par Vial con cimientos de corrupción comenzó a chantajear con irse a otro partido.

LAS TORRES DE TORRES

El todavía secretario de Pesca y al mismo tiempo candidato a gobernador que se promociona con recursos de la dependencia estatal trabaja en dos frentes. En el primero cuenta con la colaboración del panista Martín Heredia, quien en 2016 fue candidato del PAN a la gubernatura, tratando de inducir la posibilidad de que el partido albiazul lo postule en caso de que el PRI no lo abandere con la candidatura.

En el segundo frente formó una estructura operativa en redes sociales para el golpeteo contra el líder estatal del PRI y anularlo como factor de decisión o bien como el hombre fuerte de Quirino Ordaz para la elección intermedia del próximo año. Paradójicamente acusa a Jesús Valdés de utilizar la estructura priista para buscar la postulación a gobernador y le pide que la competencia sea en igualdad de condiciones.

Lo más reciente de la embestida contra Chuy Valdés es la indirecta que le lanzó el 15 de septiembre al considerar Torres, en referencia a la regiduría que ocupa en Culiacán María Elisa Palazuelos, mamá del presidente del PRI, que “yo los veo a muchos de la dirigencia preocupados más por cómo conseguir candidaturas y ver si reparten candidaturas a las familias de ellos mismos”.

Fue entonces que se afectó la vieja amistad y complicidad entre los dos priistas, ex alcaldes de Culiacán ambos, al llevar la competencia por el poder al contexto familiar. El código de la vieja política de “con la familia no te metas” fue roto por Sergio Torres dentro del PRI y la tan diseñada unidad como única posibilidad de ganar la gubernatura comenzó a tambalearse para enojo de quienes deberán decidir quién buscará relevar a Quirino Ordaz.

Fue directo “El Morrín” a la yugular de quien ve como su principal adversario al interior del PRI. “Jesús Valdés Palazuelos no sabe ser oposición y como dirigente solo piensa en candidaturas para él o sus allegados”, declaró. “Yo los veo a muchos de la dirigencia preocupados más por cómo conseguir candidaturas y ver si reparten candidaturas a las familias de ellos mismos que por enarbolar causas sociales. Y estos se enojan, pero no hay cuidado de que se enojen, porque eso dice la gente en las colonias”, remató.

Y se dice seguro y fuerte de que será candidato a gobernador. “Yo siento que vamos bien, me siento capaz y estoy listo para que el nombre de Sergio Torres aparezca en las boletas del 2021. He platicado con algunos empresarios, con algunos colegios de profesionistas por la propia actividad mía como secretario de Pesca y también por los cargos que he tenido y gracias a Dios nos hemos reunido de forma constante, pero ahorita estamos enfocados en el tema de Pesca y ahorita sobre el tema de presupuesto”.

TODOS CONTRA CHUY VALDÉS

Con la diferencia de que Sergio Torres lo grita a los cuatro vientos y los demás lo murmuran o filtran a través de terceros, los otros “hombres del gobernador” para la sucesión 2021 consideran que por llevar la marca del PRI tatuada hasta en los huesos Jesús Valdés podría ahuyentar el voto ciudadano por el rechazo a priistas que desde el gobierno de Andrés Manuel López Obrador se está promoviendo con acusaciones de corrupción contra ex funcionarios y expresidentes.

Así, los otros que se candidatean desde puestos de primer nivel en el gobierno de Quirino Ordaz comulgan con los ataques de Torres a Jesús Valdés, no tanto porque los avalen sino porque esperan que con el hecho al tumbarle esa ficha principal al gobernador aumentan las posibilidades de ser ellos los ungidos con la candidatura al Gobierno de Sinaloa.

En esa tesitura están Ricardo Madrid Pérez, secretario de Desarrollo Social; Carlos Gandarilla García, secretario de Desarrollo Sustentable; Juan Alfonso Mejía López, secretario de Educación Pública y Cultura; Sergio Jacobo Gutiérrez, coordinador de la bancada del PRI en el Congreso del Estado y Álvaro Ruelas Echave, director del Instituto Sinaloense de Infraestructura Física para Escuelas. Si le tumban al gobernador el as que tiene bajo la manga de la camisa, las posibilidades de éstos aumentan.

Jesús Valdés ha sido cauteloso a los llamados de Sergio Torres para que se suba al ring futurista con él.  “¿Por qué habría de irse por otro partido? Si alguien ha sido benévolo con su trayectoria es el PRI”, respondió cuando el secretario de Pesca lanzó otra provocación en agosto, llamando al rebelde en ciernes a ajustarse a los procedimientos partidistas.

“Quién va a ser (el candidato) los resolverán más adelante los priistas, el consejo político nacional, estatal, lo van a decidir, tendrán que analizar los mejores perfiles, a nadie se le rechaza sólo que hay que cuidar los tiempos y las formas para no ser sancionados por el Instituto Estatal Electoral. Como él lo dice, él quiere aparecer en las boletas, pues siempre ha aparecido, el partido es el que ha sido muy benévolo con él en toda su historia, en toda su trayectoria, no veo por qué en esta ocasión se tenga que ir del partido”.

En el centro del fuego amigo, el que proviene de sus correligionarios, Valdés continúa todos los días con recorridos por todo Sinaloa. Espera que todo ese trabajo político que el PRI realiza desde diferentes frentes se junte en torno a quien resulte postulado por el partido a la gubernatura. Cierra la controversia diciendo que “hay una buena guía por parte del Gobernador porque ha hecho un extraordinario trabajo y la marca está bien posicionada, ha ido recuperando terreno, cada quien puede tener sus comentarios como guste”.

En tanto Quirino Ordaz los deja enfrentarse, pelear por el territorio palmo a palmo, tener expectativas por igual, repartir prebendas a diestra y siniestra. Para él es como si tuviera a seis o más PRI´s haciendo campaña al mismo tiempo sin creer en el escenario donde la reyerta por la gubernatura entre tantos, acabe convirtiendo al partido y a la elección en un colosal desastre como el que asoma con la rebelión de Sergio Torres.