Cada vez en la capital del estado se está volviendo más habitual que los grupos del crimen organizado instalen laboratorios clandestinos en pleno casco urbano o cerca de lugares habitados, lo que convierte a estas verdaderas fábricas de drogas sintéticas en un riesgo para la población. La manipulación de grandes cantidades de precursores químicos configura en una bomba de tiempo cualquier inmueble utilizado para generar sustancias narcóticas. En ese sentido Culiacán lleva el récord del municipio y la ciudad en donde más de estos artilugios ilegales se han asegurado por parte de las Fuerzas Armadas y la Policía Estatal Preventiva, por lo que para la Secretaría de Seguridad Pública del Estado ya es preocupante que se esté poniendo en riesgo a la ciudadanía.

Por Santiago Rentería.

Un total de 31 laboratorios clandestinos de droga sintética fueron asegurados al cierre de los primeros siete meses de 2019, de los cuales cinco estaban instalados en el casco urbano de la ciudad, y la mayoría en la zona rural, lo que convierte a Culiacán en este año en curso en la capital de la metanfetamina.

En abril pasado, por si fuera poco, fue asegurado por elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional y la Policía Estatal Preventiva el primer narcolaboratorio para fabricar fentanilo, una droga sintética que se asemeja al opio, y usada ampliamente en medicina como anestésico. De hecho, el fentanilo ha estado siendo sustituido en varias ciudades de Estados Unidos como una droga más poderosa que la heroína, lo que ha derivado en más muertes por sobredosis en ese país.

De acuerdo con la Secretaría de Seguridad Pública, el aseguramiento de este laboratorio de fentanilo, el primero de su tipo en México, sucedió el 11 de abril en un domicilio de la colonia Lomas de San Isidro, cuando elementos de la Estatal Preventiva observaron a dos jóvenes en una motocicleta, a los cuales les marcaron el alto para revisarlos. Los motociclistas aceleraron y dispararon contra los policías e intentaron ocultarse en una casa.

Fue ahí cuando los agentes percibieron el fuerte olor a químicos, por lo que solicitaron la presencia de los elementos de la Fiscalía General de la República. En palabras del titular de la SSP, el teniente coronel Cristóbal Castañeda Camarillo, esta fue la primera vez que se activó la alerta por un narcolaboratorio de este tipo dentro de la ciudad, pues el fentanilo es altamente peligroso.

“En las periciales se determinó que se trata de un laboratorio para fabricar fentanilo, una droga sumamente peligrosa, poco conocida en México, lo cual nos ha puesto en alerta para investigar a fondo este caso”, aseguró Castañeda Camarillo

El recuento de la capital de la droga

Apenas el martes 30 de julio pasado, el Ejército Mexicano y Seguridad Pública volvieron a reportar el aseguramiento de dos domicilios en plena capital sinaloense en donde fueron encontrados un narcolaboratorio de metanfetamina y precursores químicos a los que le prendieron fuego de manera intencional, lo que alertó a los cuerpos de rescate como Bomberos y Protección.

De nueva cuenta, Castañeda Camarillo salió a informar a medios sobre el riesgo que representa para la población civil que la delincuencia esté tomando por asalto casas particulares para montar su fructífero negocio de droga.

En el primer caso, de acuerdo con el parte oficial de la Policía Estatal Preventiva, en la colonia Gustavo Díaz Ordaz se reportó la presencia de dos personas que consumían cristal en la vía pública, por lo que de inmediato acudieron agentes y militares. La sorpresa fue que no solo encontraron a los supuestos drogadictos, sino que se toparon con el olor característico de los químicos.

?“Se recibió una llamada donde manifestaban que había dos personas consumiendo droga. Afortunadamente teníamos unidades cercanas, en coordinación con Sedena y PEP se atendió el reporte, y cuando vieron la presencia dos personas que se encontraban consumiendo droga, uno sale corriendo en motocicleta a la calle y otro entra a la casa", explicó.??Más tarde, ese mismo día, las autoridades recibieron el aviso de que se estaba incendiando un domicilio en el fraccionamiento Villa Fontana, al otro extremo de la ciudad. Cuando acudió el personal de Bomberos, descubrió que el fuego estaba en una camioneta de redilas la cual era usada para transportar precursores químicos.??El fuego alcanzó a dañar de manera leve algunas viviendas cercanas. En el inmueble en donde estaba la camioneta, el Ejército encontró además equipo para transportar los químicos, así como diverso material para la elaboración de esta droga sintética.???

La zona rural, bastión de la metanfetamina

La zona rural del municipio de Culiacán se ha convertido por mucho en el bastión de la metanfetamina, pues es usada, en ciertas regiones controladas por el narco, como sitio para montar laboratorios sencillos debajo de arboledas, alejadas de poblados, pero en algunas ocasiones una casa contigua a una comunidad es propicia para elaborar drogas.

A principios de junio, la Secretaría de Marina informó que en coordinación con la Estatal Preventiva lograron asegurar tres laboratorios en las inmediaciones del poblado de El Saucito, perteneciente a la sindicatura de Eldorado, al sur del municipio.

De acuerdo con la versión oficial que, como en la mayoría de los casos no hubo detenidos, fue gracias a recorridos terrestres que los elementos de la Armada de México y personal de la Policía Estatal dieron con el hallazgo del primer narcolaboratorio y posteriormente en búsqueda a pie con las dificultades de la oscuridad, encontraron los otros dos.

En total, en los tres puntos, se aseguraron 17 mil 750 litros de producto químico para elaboración de metanfetamina, lo que, traducido a toneladas y dinero, representa un golpe de 150 a 170 millones de dólares al narcotráfico de acuerdo al mercado de Estados Unidos.

Los laboratorios estaban enclavados en una zona de palmeras, árboles y maleza en las afueras de Eldorado. Estaban camuflados con la vegetación y carpas verdes y color tierra. Uno de los laboratorios, el de la última fase de producción, tenía infraestructura industrial y planta de energía eléctrica. Incluso cuando “cayó” la autoridad los reactores todavía se estaban calientes. Este laboratorio se encontraba a una mayor distancia de los otros dos, según las autoridades, para evitar ser desmantelado en caso de encontrar los dos primeros.

Se estableció que en los tres emplazamientos trabajan por lo menos 15 personas, ya que había montado un campamento con casas de campaña, abanicos de pedestal, cobijas, zapatos, guantes del tipo industrial, también había barras de pan, frijol en lata, cartones de huevos, verduras y productos frescos en hieleras. Al parecer todos lograron escapar cuando escucharon los motores de las patrullas. Según los marinos, usaron para esto motocicletas y cuatrimotos, fáciles de conducir entre la espesa vegetación de la zona.

El 21 de junio pasado, de nueva cuenta la Secretaría de Seguridad Pública aseguró otro narcolaboratorio, ahora montado dentro de una casa particular ubicada en la orilla de la sindicatura de Sanalona. De lejos la casa resaltaba debido al color rosa mexicano de sus paredes.

Ahí encontraron seis mil 500 litros de químicos y unos 150 kilos de metanfetamina ya elaborada y lista para empaquetarse. En esa ocasión se alertó de que el laboratorio estaba cerca de un arroyo cuyas aguas son usadas para consumo humano, riego de cultivos y el ganado de la región. También se estimó que los delincuentes llevaban un mes produciendo droga sintética en ese inmueble que era conocido en Sanaloana como “la casa rosita”.