En los últimos cuatro meses, el epicentro de la nueva guerra entre cárteles y contra el Estado mexicano parecen delinearse de manera frontal con una espiral incontenible de violencia en algunos estados del sur, centro y occidente del país, en donde el Cártel Jalisco Nueva Generación ha extendido sus tentáculos. De cierto, Nemesio Oseguera Cervantes, El Mencho, se ha convertido en uno de los últimos capos que enfrenta al sistema nacional, al acusar al gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez, de entregar “la plaza” a sus rivales, un ala del Cártel de Sinaloa con el que se preludia un choque de trenes. Pero mientras todo esto sucede, y el país se mantiene con los más altos niveles de asesinatos, la Secretaría de Gobernación confirma que “se mantiene un diálogo” con muchos grupos bajo el signo de que el fin de la paz, justifica los medios. Por ahora, la guerra de El Mencho y sus enemigos parece ser el gran desafío de la Cuarta Transformación mexicana.

Redacción DePrimeraNoticias

Uno de los últimos videos de contrainteligencia operativa, exhibe a un grupo de sicarios del Cártel Jalisco Nueva Generación avanzar por una región de la Tierra Caliente, en Michoacán, en busca de integrantes de Los Viagras o, como ahora se hacen llamar, La Nueva Familia Michoacana, un cártel mercenario disidente de la antigua organización que dirigió Servando Gómez Martínez, La Tuta, y que de acuerdo con investigaciones fue armado por el gobierno de Enrique Peña Nieto para combatir a Los Caballeros Templarios.

Las imágenes son significativas: decenas de hombres vestidos tipo militar, bien apertrechados con armas automáticas, atraviesan un pequeño arroyo mientras festejan su avance por tierra michoacana, como si se tratara de un ejército de invasión que va limpiando el frente de batalla. No se trata de un único video. Como el descrito, en los últimos cuatro meses en que Nemesio Oseguera Cervantes, El Mencho, inició la guerra contra Los Viagras, se han difundido varios, incluyendo otros frentes de guerra.

El pasado 15 de agosto, las redes sociales fueron testigo de cómo el CJNG lanzó su video propagandístico en el que acusaba al gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez, del partido Movimiento Ciudadano, de entregar el territorio a un sobrino del extinto Ignacio Nacho Coronel Villarreal.

En otros clips transmitidos por las redes sociales (siempre como estrategia) se observan a las huestes bien armadas cercando una carretera; en otros aparecen torturando a personas sometidas y que señalan de ser rivales. La contrainformación como parte de una guerra.

Aunado a esto, el debilitamiento del grupo criminal comandado por José Antonio Yépez Ortiz, El Marro, líder del Cártel de Santa Rosa de Lima, afincado en Guanajuato, también movilizó a las tropas del Mencho para terminar con una pugna abierta desde hace años atrás, y que ha hundido a esta entidad en una violencia interminable, en parte también alentada por el huachicol.

Todo esto, según especialistas en seguridad, como la periodista y académica Anabel Hernández, está derivando en un preludio de guerra abierta entre el Cártel del Mencho y el de Sinaloa, dirigido por Ismael Zambada García, El Mayo, aliado con Rafael Caro Quintero y los hijos de Joaquín Guzmán Loera.

De hecho, la pugna ya empezó desde 2018, cuando el gobierno federal todavía en manos de la administración de Peña Nieto detectó que El Mayo Zambada empezó a apoyar a la facción de Enrique Sánchez Martínez, alias El Cholo, viejo aliado de Oseguera Cervantes, quien se separó al enterarse que su exjefe había dado la orden de eliminarlo por alta traición.

Del Mayo, dijeron en aquel entonces, se supo que tomó esta determinación debido al asedio constante que el Cártel de Sinaloa estaba pasando en la ciudad de Tijuana, tomada por asalto en una alianza entre el reducto de los Arellano Félix y el CJNG. De este pacto surgió el Cártel Tijuana Nueva Generación.

Hasta ahora, de acuerdo con fuentes de seguridad en el estado, esta guerra que afecta a Michoacán, Jalisco, Colima, Guerrero y Guanajuato no ha llegado a Sinaloa, un territorio que en general ha logrado disminuir los altos índices de homicidios en el último semestre de 2019. Por lo pronto, el descenso de la violencia en la entidad parece más producto del nulo conflicto que existe entre las organizaciones locales, que en la estrategia de los órdenes de gobierno.

El desafío de y contra AMLO

A cinco meses de la creación oficial de la Guardia Nacional (confirmada en marzo por todos los estados), este grupo élite de la Cuarta Transformación se ha visto con un despliegue inoperante. Uno de los puntos más débiles que se le han criticado al cuerpo militar promovido por el presidente Andrés Manuel López Obrador es que no se cuenta con un despliegue suficiente ni con una estrategia para combatir al crimen organizado.

La fuerza operativa de la Guardia Nacional no se ha visto traducida en esfuerzos por paliar la inseguridad en las regiones más afectadas. Más bien ha sido usada, según críticas, en la contención del flujo migratorio de ambas fronteras por presiones del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

Pero además esta situación parece agravarse con las declaraciones del propio jefe del Ejecutivo mexicano, que, ante hechos atroces como la ejecución de 19 personas en Uruapan, Michoacán, algunas de ellas colgadas de un puente vial, solo apuntó a decir: “Son lamentables estos hechos y constituyen un desafío a las autoridades”.

Y sentenció: “Vamos a seguir combatiendo a la delincuencia, pero no vamos a caer en la trampa de declarar la guerra como lo hicieron en otros tiempos, vamos a seguir atendiendo las causas”.

El mensaje brutal del Cártel Jalisco, sin embargo, ya estaba dado. Las 19 víctimas de Uruapan, encontradas el 8 de agosto, fue solo el comienzo de una estrategia mediática y criminal que justamente, como lo señaló AMLO, desafía a las autoridades. Días después, el 15 de agosto, empezó a circular un video donde aparece una veintena de hombres armados con artillería pesada y vestidos tipo militar, unos de pie y otros acuclillados, con uno de ellos sentado al medio que lee un comunicado en nombre del Cártel Jalisco Nueva Generación.

“A todos ustedes ciudadanos de México, con mucho respeto me dirijo a ustedes. Estamos en pleno siglo 21 y todos sabemos que no se puede tapar el sol con un solo dedo. Nosotros el Cártel Jalisco Nueva Generación nos deslindamos y hacemos hacer ver a la ciudadanía que no tenemos nada que ver con ningún acto delictivo efectuado en los estados de Puebla, Ciudad de México, Oaxaca, Chiapas, Estado de México, Cuernavaca y Chihuahua”.

Por su puesto, plagado de un lenguaje propagandístico, el grupo criminal aseguró, entre otras cosas, que “no secuestran, roban a la gente, cobro de piso o extorsión a la ciudadanía”, y le comunicaron al gobierno que ellos no tienen relación con las casas de seguridad encontradas en Jalisco.

“El gobernador Enrique Alfaro es el que puede decir de quién son esas casas”, a quien atribuyeron a Martín Coronel y Esteban Rodríguez, alias El Águila, ambos delincuentes protegidos, aseguraron, por el mismo jefe del Ejecutivo jalisciense.

“Siendo el mismo Alfaro el único interesado en quitarnos el estado para dárselos a estas personas”. Enseguida, en el mensaje El Mencho señala que Enrique Alfaro no cumplió con el acuerdo que hizo con él de tener Jalisco bajo su mando.

En cambio, a López Obrador lo trata bien: “Señor López Obrador, confiamos en que usted es una persona justa que hace su trabajo, que defiende a la ciudadanía, como yo defiendo a mi gente”. Luego apunta que en otra ocasión dará los detalles del prestanombres de Alfaro con el que guarda sus cuentas en Suiza e Islas Caimán.

En su respuesta, el gobernador de Jalisco rechazó las imputaciones y aseguró que su gobierno no dialoga con delincuentes. “Se trata de un montaje armado”, dijo en un comunicado, y mencionó que presentaría denuncia ante la Fiscalía General de la República.

“Para el gobierno estatal el combate a la violencia es un asunto de mayor serenidad. Por eso, desde el inicio de esta administración dejamos en claro que este gobierno no dialoga, ni dialogará con delincuentes”, puntualizó.

Sin embargo, de manera contradictoria y para sellar esta declaración, cinco días más tarde, el 20 de agosto, la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, indicó a los medios que se encontraban dialogando con muchos grupos criminales para emprender el camino de la paz en el país.

Al ser cuestionada al término de un evento en la Ciudad de México, en torno a una tregua que pudieran estar negociando en el estado de Guerrero, Sánchez Cordero corrigió:

“No, estamos dialogando ahorita, estamos dialogando con muchos grupos, de verdad nos ha manifestado ya que no quieren seguir en esta violencia, que ellos quieren deponer las armas y ellos quieren caminar hacia la paz”, dijo.

—¿Qué grupos?, le preguntaron.

“Varios grupos, no te puedo especificar”.

¿Un choque frontal con Sinaloa?

Aunque la Secretaría de Seguridad Pública y Participación Ciudadana (SSPPC), bajo el mando de Alfonso Durazo Montaño aseguró que no es la voz de Oseguera Cervantes la que aparece en el video contra Enrique Alfaro, la periodista Anabel Hernández aseguró que sí era, de acuerdo con fuentes de Estados Unidos y de la FGR.

Pero más allá del video y su contenido, todo parece indicar que la guerra que encabeza El Mencho contra Los Viagras y otros grupos criminales, se advierte también un anuncio de un enfrentamiento mayor entre el CJNG y el Cártel de Sinaloa. A este enfrentamiento se estaría sumando los hijos del Chapo y Rafael Caro Quintero, en un intento por detener el avance de El Mencho por otros territorios del país.

Uno de esos indicios que preludian un conflicto más grande, es que Martín Coronel (a quien Alfaro habría entregado la plaza) es sobrino directo de Nacho Coronel, un antiguo aliado del Chapo Guzmán y del Mayo Zambada.

A su vez, Coronel también se encuentra aliado con El Cholo, quien trata de diezmar las fuerzas del Mencho sobre todo en Colima, punto estratégico de los embarques de químicos para la manufactura de metanfetaminas y que provienen del continente asiático. Otro puerto clave del Pacífico es Lázaro Cárdenas, en donde incluso la mafia china tiene sus intereses en el expolio de material pétro extraído de México.

A pesar de los tambores en guerra que suenan del otro lado de Nayarit, en Sinaloa por el momento no se escucha una alerta al interior del Cártel de Sinaloa. En 2016 y 2017 en que se habló de la alianza que habría hecho Dámaso López Núñez con El Mencho, las células de sicarios del Mayo y de los Chapitos realizaron diversos operativos de seguridad en Culiacán para evitar que ingresaran gente de Jalisco.

Guardia Nacional, limitada de operaciones

Vendida por el presidente López Obrador como el principal cuerpo élite militar para pacificar el país, después de más de doce años de guerras intestinas entre grupos del crimen organizado, la Guardia Nacional ha sido y sigue siendo muy criticada por diversos sectores desde su creación a la fecha, que apenas lleva seis meses.

Y es que al tratarse de un “ejército dentro de las Fuerzas Armadas regulares”, la Guardia —según especialistas— no ha cuajado lo suficiente para atender la problemática sumamente compleja que se vive en los diferentes territorios en donde existen conflictos.

Uno de los especialistas en temas militares, el periodista Juan Veledíaz señalaba apenas en mayo pasado que detrás de la conformación de la Guardia Nacional existía mucha improvisación y poca idea de estrategias de seguridad planeadas. Sobre todo, parece que se improvisa en la preparación de los elementos y se ha ido de traspiés en traspiés el tema de los cursos para los nuevos reclutas.

“La falta de planeación ya comenzó a generar los primeros roces y disgustos. Nadie del personal que se encuentra en capacitación sabe cuál será su salario, viven en la incertidumbre pues desconocen su futuro a corto plazo”, señala Veledíaz en un análisis sobre la conformación de la Guardia.

En los cursos de capacitación, realizados desde mayo en la base militar de San Miguel de los Jagüeyes y en la base de Santa Lucía, los oficiales se quejaban de todo, desde falta de agua caliente, comida racionada, la falta de aulas, de instructores y de las condiciones elementales y dignas.

“Otro problema surge de las formas en cómo se conducen militares y civiles. Dicen los agentes que los militares y marinos están acostumbrados a tratar a sus elementos como animales de corral. Esto ya ocasionó roces, los de la Policía Federal dicen que ellos han sido formados en academias sin improvisaciones, con protocolos y no al vapor”.

Con todas estas críticas, el gobierno federal ha reaccionado con el argumento de que se encuentra en una etapa inicial de conformación, y que será a partir de diciembre cuando se inicie con la segunda etapa de la Guardia Nacional. Así, será hasta el 2020 cuando entre en operaciones un cuerpo élite militar para atender la demanda social de seguridad.

Por otro lado, el presidente ha insistido durante sus conferencias de prensa que la violencia en el país se combate atendiendo “a las causas”, de ahí que los programas sociales dirigidos a los jóvenes son parte de esta estrategia de “arrancar base social al crimen organizado”.