El futbolista mexicano Joao Maleck provocó la muerte de una pareja de recién casados al chocar su auto contra ellos. Ahora Maleck se encuentra en prisión preventiva en el Penal de Puente Grande, Jalisco, a la espera de ser condenado o de que sus abogados lleguen a un acuerdo con los familiares de las víctimas. Su historia se suma a la de otros deportistas que se han dejado deslumbrar por los excesos de la fama y el dinero.

Por David Fuentes M.

Eran las 8.49 horas del domingo 23 de junio cuando el futbolista Junior Joao Maleck Robles, de 20 años de edad, conducía a exceso de velocidad un Mustang blanco de modelo reciente por avenida Tepeyac, en la colonia Haciendas del Tepeyac, en Zapopan, Jalisco.

Poco antes de llegar al cruce con la calle Playa de Hornos impactó por la parte trasera a un Chevrolet Aveo en el que viajaba una pareja de recién casados. El auto fue lanzado unos 30 metros hasta que se estrelló contra una palmera en un camellón. Tras este segundo impacto, el Aveo salió disparado unos metros más con la parte trasera totalmente comprimida, mientras que el auto que conducía el futbolista quedó detenido a media calle.  

Guardias de seguridad de una privada y personas que caminaban por la zona corrieron a atender a los heridos. Tanto el futbolista como su acompañante salieron por su propio pie, aunque este se desplomó apenas unos segundos después de salir del auto. En el Aveo, en cambio, ya no había nada que hacer: la pareja que había contraído matrimonio un día antes falleció de manera instantánea por desnucamiento.

¿Quién es Joao Maleck?

Es hijo del futbolista camerunés nacionalizado francés, Jean Claude Maleck, y de la mexicana Diana Robles. Ambos se conocieron en 1998 cuando el primero fue contratado para jugar con el desaparecido equipo de los Tecos de la Universidad Autónoma de Guadalajara. Fruto de esa relación, Junior Joao nació el 13 de marzo de 1999 en la capital tapatía. Luego de su participación con Tecos, Jean Claude fue contratado por el Club Leones Negros de la U de G. y más tarde por el San Luis. Pasó sin pena ni gloria por el futbol mexicano y a los pocos años decidió regresar solo a Francia, dejando a su hijo a cargo de su madre.

En una entrevista con El Universal, Joao confesó que solo veía a su padre una vez al año y que lo miraba más bien como si se tratara de un tío. En cambio, a quien consideraba su verdadero padre era a su abuelo materno: “Le debo todo a mi abuelo. Es para mí el máximo ejemplo. Es como mi héroe”, señaló.

Desde la infancia se interesó por el futbol. A los 12 años empezó a jugar en la categoría infantil del Club Deportivo Guadalajara, donde fue descubierto por el mediocampista Marco Fabián, quien en 2014 se lo llevó a su recién inaugurada academia de futbol en el parque Metropolitano. Esta academia es dirigida por su padre, Marco Antonio Fabián Vázquez, quien años más tarde iniciaría una relación sentimental con la madre de Joao Maleck.

Su talento pronto fue valorado por el Club Santos que decidió darle una oportunidad para su equipo en la categoría de la Sub 17. El 9 de junio de 2015, Marco Fabián publicó un tweet en el que presentaba oficialmente a Joao Maleck como un joven futbolista egresado de su academia y al que le deseaba mucho éxito en su primera experiencia profesional.

Con Santos, Maleck logró el campeonato al derrotar al Pachuca en la final por  marcador de 6 a 3 de la Sub 17. Durante su primer torneo, Maleck anotó 7 goles en 21 partidos. En el siguiente torneo, alcanzó 14 goles en 23 partidos. Las habilidades del futbolista fueron descubiertas por el Club Oporto, de Portugal, quien solicitó a Santos el préstamo del jugador por un año con opción a compra.

Durante su primer torneo con el equipo Sub 19 en Europa, Maleck no quedó mal: anotó uno de los seis goles con los que su equipo venció al Desportivo das Aves. Pronto estuvo en la mira de otros clubes. El Sevilla Futbol Club, de segunda división, inició negociaciones con Santos para arrebatárselo al Oporto. Tras meses de negociaciones económicas con ambos clubes, el Sevilla logró quedarse con Maleck para la temporada 2018-2019.

Sin embargo, en diciembre pasado el jugador sufrió una lesión en una rodilla por la que incluso debió ser operado, razón por la cual no debutó con el equipo hasta el 3 de marzo de 2019, en un partido contra el Club Deportivo Don Benito que quedó en empate a uno.

Al jugador le faltaban siete días para concluir su contrato de préstamo con opción a compra con el Sevilla. Se esperaba que este fuera renovado por otro año más. Sin embargo, tras el accidente en el que se vio involucrado, el equipo anunció que cortaba relaciones con el jugador mexicano al que, agregaron en un comunicado de prensa, habían intentado contactar tras conocer los hechos pero no habían podido comunicarse con él.

La noche del accidente

Joao regresó a Guadalajara de vacaciones. La noche del sábado 22 de junio decidió pasar la noche con varios amigos recorriendo algunos antros de Andares, una de las zonas más exclusivas de Zapopan. Salió a la calle en un Ford Mustang blanco, propiedad del padre de Marco Fabián, de acuerdo con el periodista Ignacio Suárez.

Estuvo en un antro donde a las 3.13 de la madrugada del domingo subió un video a su cuenta de Instagram en el que aparece divirtiéndose con sus amigos. En el video sus acompañantes aparecen con bebidas en la mano. Tras el accidente, y en cuanto intervinieron en el caso los abogados del Club Santos, el video fue eliminado y su cuenta de Instagram cerrada. Sin embargo, las imágenes ya habían sido descargadas por varios medios y usuarios de las redes sociales.

De acuerdo con el alcalde de Zapopan, Jesús Pablo Lemus, el jugador estuvo en ese antro hasta las 4.15 de la madrugada. Los centros nocturnos de la zona metropolitana de Guadalajara tienen permiso de operar hasta las 3 de la madrugada, con una hora de extensión para que los clientes desalojen los locales. El alcalde señala que hay testimonios de clientes que se encontraban esa noche en el antro que aseguran que el futbolista estaba en completo estado de ebriedad, por lo que, incluso, una persona le sugirió al valet parking que no le entregara las llaves de su auto.

“Tenemos el testimonio de una persona que se encontraba en el valet parking cuando le entregan el vehículo a este jugador de futbol que incluso hace una recomendación al propio valet de que no le entregue el auto porque esta persona se encuentra en estado de ebriedad. No hace caso a esta sugerencia del cliente y sale a las 4.15 de la mañana con rumbo desconocido”, señala Lemus.

Sobre la ubicación del futbolista entre las 4.15 de la madrugada y las 8.49 de la mañana en que ocurrió el accidente, no hay información oficial. De acuerdo con el propio alcalde de Zapopan, “hay versiones de que se encontraba en un antro de otro municipio de la zona metropolitana de Guadalajara”, aunque también se ha señalado que probablemente continuó bebiendo en casa de amigos o que incluso es falso que el antro haya cerrado a las 4 de la madrugada como lo establece el reglamento.

A las 8.49 horas, Maleck conducía el Mustang por avenida Tepeyac. En un principio, algunos medios señalaron que el auto avanzaba a 160 kilómetros por hora en una calle donde el límite de velocidad es de 40 kilómetros por hora. Sin embargo, el peritaje oficial realizado por la Fiscalía General de Jalisco establece que el auto avanzaba a 70.73 kilómetros por hora.

Para la familia de las víctimas, hay una discordancia entre la velocidad del impacto que se aprecia en las imágenes de video captadas por distintas cámaras de seguridad y de los testimonios de los vecinos, con la que señala el informe pericial, por lo que señalan que la defensa del futbolista está presentando pruebas “amañadas”, “compradas”, además de que aseguran que el Aveo “no pudo haber quedado destruido por un impacto a 70 kilómetros por hora”.

Metros adelante del Mustang circulaba un Chevrolet Aveo a 35 kilómetros por horas. En el auto viajaban Alejandro Castro Martínez, de 35 años, y María Fernanda Peña Álvarez, de 29 años, él licenciado en Pedagogía y ella licenciada en ciencias de la Comunicación, quienes la tarde del sábado se habían casado en la catedral de Zapopan y ese domingo tendrían su fiesta de bodas.

De acuerdo con testimonios de los familiares a distintos medios locales, la pareja se dirigía a la casa de una maquillista que arreglaría a la novia para una sesión de fotos que tendrían esa mañana, antes de la comida y la fiesta que estaba programada para iniciar a las 15 horas en un salón campestre ubicada en San Agustín, Jalisco.

Tras el impacto, Joao y su acompañante fueron auxiliados por civiles y guardias de seguridad de una privada, quienes reportaron los hechos al número de emergencias. De acuerdo con lo relatado por un vecino a El Mural, cuando Joao vio que “la cosa estaba grave y que los vecinos le empezaron a insultar y a reclamar, se quedó acostado en el césped del camellón diciendo a cada rato que era un futbolista”. Este testigo asegura que percibió aliento alcohólico en Maleck, además de que en el Mustang había botellas de cerveza, las cuales fueron sacadas del auto por personas vestidas de negro que llegaron antes que la ambulancia y las patrullas y les advirtieron a los vecinos que no se metieran porque el futbolista “tiene amigos muy peligrosos”.

El jugador fue trasladado en una ambulancia custodiada por policías de Zapopan a la Cruz Verde, en la colonia Las Águilas. El periodista Ignacio Suárez publicó en sus redes sociales unas fotos de Maleck mientras es atendido en una camilla, en las que se le observa consciente, con los ojos abiertos, con suero y un vendaje en la cabeza a causa de una herida en la frente. Lleva la misma playera Dolce & Gabanna negra con la que aparece en el video grabado horas antes en el antro de Andares.

En la Cruz Verde, Maleck recibió la visita no solo de sus familiares sino de los abogados de Grupo Orlegui, quienes llevan los asuntos legales del Club Santos Laguna y del Atlas. Pasaron casi cinco horas antes de que al jugador le fuera realizado el examen de orina para determinar si conducía en estado de ebriedad. Una vez realizada la prueba de alcoholemia, a las 15 horas el jugador fue trasladado a una clínica privada para que le practicaran una tomografía. Regresó a la Cruz Verde, siempre custodiado por la Policía Municipal, a las 5.36 de la tarde. Luego fue enviado a un hospital privado donde finalmente quedó a disposición del Ministerio Público.

El jugador fue acusado de “homicidio doloso” y “daño a las cosas”, por lo que la Fiscalía solicitó la medida cautelar de prisión preventiva dado que Maleck no reside en México y había peligro de que huyera del país. Fue internado en el penal de Puente Grande, donde permanecerá seis meses, mientras el Ministerio Público concluye las investigaciones y el juez da un veredicto.

De acuerdo con los exámenes de orina, al momento del accidente, Maleck no iba lo suficientemente alcoholizado para considerarlo como un “agravante”. Las pruebas señalan que llevaba 50ml de alcohol por cada cien mililitros de sangre. En el Código Penal de Jalisco, un exceso de alcohol sería de 150 miligramos por cada cien mililitros de sangre. Para la familia de las víctimas, esas pruebas están “compradas” ya que al futbolista le habrían suministrado sueros para que, al momento de realizarle la prueba, cinco horas después, se le bajaran los niveles de alcohol en la sangre.

Acuerdo con los familiares

Durante la segunda audiencia realizada en el centro de control de Puente Grande, tanto la defensa de Maleck como la familia de la pareja de fallecidos, aceptaron que el Instituto de Justicia Alternativa se involucre en el caso para buscar un arreglo económico, lo que abre la posibilidad de llegar a un acuerdo y que el futbolista abandone el penal en un mes.

"El proceso se suspendió para que, de manera amigable, traten de llegar a una salida alterna, un acuerdo, dado que ya existe un dinero garantizado, de una póliza", señaló Javier Alberto García González, uno de los abogados de Maleck, refiriéndose al seguro de 3 millones de pesos del Mustang.

Los padres de María Fernanda aseguran, en cambio, que el juez quitó la condición de “delito grave” al caso luego de las “pruebas falsas” presentadas por la Fiscalía, por lo que piden justicia: “Los abogados del asesino están presentando pruebas falsas, como un video cortado diciendo que iba a 70 km/h. Además, se le tomaron las pruebas de alcohol después de 8 o 12 horas y se le suministró una sustancia para borrar evidencias en los exámenes de orina y sangre”, señaló la madre de María Fernanda. “Esta tragedia no debió suceder, mi hija y su esposo tenían un futuro por delante y son víctimas de un borracho futbolista. No me resigno a no volver a ver con vida a mi hija adorada”.