El intermediario entre Enrique Peña Nieto y la empresa brasileña Odebrecht fue detenido en Marbella, España, luego de 9 meses de búsqueda. Emilio Lozoya está acusado en México de delincuencia organizada, cohecho y operaciones con recursos de procedencia ilicita. Su abogado ha señalado que su cliente no se mandaba solo, que él solo obedecía órdenes, que su jefe directo era Peña Nieto. Sin embargo, el gobierno de López Obrador ha dado indicios claros de que al expresidente no se le tocará.
Por Redacción De Primera Noticias.
Vivía desde hace varios meses en una exclusiva villa ubicada al norte del puerto de Marbella, España, rodeado de toda clase de lujos. La Zagaleta es un fraccionamiento amurallado, rodeado de bosques, a las afueras de la ciudad, donde viven sobre todo millonarios alemanes e ingleses que tienen en esta zona del sur de España el sol asegurado para los largos y duros meses invernales del norte de Europa.
Pocas veces salía del complejo residencial. A su alcance tenía tiendas, campos de golf, gimnasios, restaurantes. Salir del fraccionamiento implicaba ponerse en peligro de ser detenido. Pero Emilio Lozoya Austin se cansó de la jaula de oro y pidió un uber para salir a pasear por la costa, a unos 20 minutos por carretera. En cuanto abandonó el complejo, fue abordado por agentes de la Policía Nacional Española, quienes le marcaron el alto y le pidieron que se identificara.
El ex director de Pemex durante el sexenio de Enrique Peña Nieto presentó una licencia de manejo falsa, con su fotografía pero con el nombre de Jonathan, expedida en la Ciudad de México. Lozoya intentó defenderse argumentando que él no era la persona que buscaban, pero sus rasgos físicos coincidían con la ficha emitida por Interpol.
Tras su detención, Lozoya fue trasladado a los calabozos de los juzgados del Marbella, desde donde declaró por videoconferencia por varias horas la tarde del miércoles. No fue sino hasta la mañana de este jueves –noche en España- que el juez de la Audiencia Nacional, Ismael Moreno, ordenó el ingreso en prisión provisional, incondicional y comunicada de Lozoya Austina una vez que este rechazó ser extraditado a México.
La prisión preventiva se ordenó ya que el juez argumentó que existe riesgo de fuga toda vez que Lozoya no está afincado en España, tiene un elevado poder adquisitivo y lazos internacionales, mismos que complicaron su captura, como señaló la policía española en un comunicado lanzado horas después de la aprehensión.
Tras darse a conocer la noticia, el abogado Javier Coello Trejo lamentó que a su cliente ya lo hayan convertido en México en un ícono de la corrupción e insistió en lo que ha venido repitiendo desde que se giró la orden de aprehensión en julio de 2019: “él no se mandaba solo. Hay mucha gente que tiene que hablar de esto y mucha gente que tiene que declarar”.
“Situaciones como el caso Agronitrogenados, Fertinal, Odebrecht, ¿el presidente no estaba enterado? ¡Claro!, y además hay acuerdos por escrito. El presidente no firma nada, al presidente le llevan los acuerdos y él palomea, pero los acuerdos están la papelería de la Presidencia de la República. Todo llegará a su momento. Aplaudo el combatir a fondo la corrupción, pero de todos, no justicia selectiva”, expresó en entrevista con Radio Centro.
Peña, jefe de Lozoya
En 2017 la prensa brasileña dio a conocer que la empresa Odebrecht había pagado sobornos por 10 millones de dólares a Emilio Lozoya a cambio de recibir licitaciones para realizar obras en una refinería de Tula, Hidalgo.
De acuerdo con medios brasileños, el exdirector de Odebrecht México, Luis Alberto de Meneses Weyll dijo a la Fiscalía Nacional de Brasil que le había ofrecido sobornos millonarios a Lozoya a partir de marzo de 2012, cuando este formaba parte del Comité de Campaña del entonces candidato a la presidencia Enrique Peña Nieto. Lozoya trabajaba como coordinador de Vinculación Internacional para conectar al candidato con empresarios extranjeros.
Como el candidato del PRI iba arriba en las encuestas y Lozoya formaba parte del primer círculo del exgobernador del Estado de México, Odebrecht le ofreció millones de dólares que serían repartidos en varias etapas, a cambio de que, una vez que Peña Nieto ganara las elecciones, se les concediera una licitación por un valor de 115 millones de dólares para realizar remodelaciones a la refinería Miguel Hidalgo, ubicada en el municipio de Tula.
El primer pago se habría hecho en marzo de 2012. El último habría sido en 2014. Lozoya fue director de Pemex entre 2012 y 2016. En un comunicado de prensa subido a su cuenta de Twitter, Lozoya negó haber recibido esos sobornos.
“Niego categóricamente las imputaciones y la información que hace referencia a supuestos actos de solicitud y/o recepción de sobornos directa o indirectamente por mi parte a la empresa Odebrecht o a sus funcionarios”, señaló en el comunicado. “Así mismo, suponiendo que hubiese alegatos en mi contra por parte de delincuentes confesos, habría que por lo menos mencionar que estas personas pueden decir cualquier cosa a cambio de reducciones de condenas.”
La trama de corrupción de la empresa brasileña fue destapada el 21 de diciembre de 2016 por el Departamento de Justicia de los Estados Unidos cuando publicó una investigación en la que se aseguraba que Odebrecht había sobornado a funcionarios de gobierno de 12 países, entre ellos, Panamá, Perú, Argentina, Venezuela, Ecuador, Estados Unidos, Colombia y México.
A cargo de la investigación sobre los presuntos nexos de Lozoya con esta red de sobornos de la empresa brasileña se encontraba Santiago Nieto Castillo, quien fue titular de la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales.
En octubre de 2017, el diario Reforma publicó una entrevista con Nieto Castillo en donde este aseguró que Lozoya Austin lo había intentado presionar para que declarara públicamente su inocencia en el caso.
Esto fue considerado por la Procuraduría General de la República (PGR) como una falta “al código de conducta de la dependencia” por dar a conocer información sobre casos que se encuentran en curso y se ordenó su destitución.
En la entrevista, Nieto Castillo asegura que el ex director de PEMEX le envió una carta diciendo que quería que hiciera un pronunciamiento público sobre su inocencia.
“Me envía un currículum diciéndome quién es su papá, quién es su mamá, en dónde estudió. Nunca entendí esa parte. Creo que esta carta refleja en gran medida la impunidad, es decir, el planteamiento de que soy una figura pública y la autoridad se tiene que disculpar. Esto es lo que me parecía particularmente grave”.
“Los pagos [a Lozoya] comenzaron en marzo de 2012, cuando era uno de los principales integrantes del comité de campaña del actual presidente”, señaló el diario brasileño. “Peña Nieto lideraba las encuestas, el PRI se acercaba a una probable victoria y Lozoya era cotizado para asumir un cargo de relevancia en el futuro gobierno”.
El primer pago para Lozoya habría sido por 4 millones de dólares como una manera de señalar que, si el PRI ganaba las elecciones del 2 de julio de 2012, la empresa estaba dispuesta a pagar más a cambio de millonarios contratos en México.
Las reacciones tras su despido no se hicieron esperar. Líderes de opinión y representantes de todos los partidos de oposición señalaron que la remoción de Nieto era una represalia del gobierno federal por haber evidenciado a Lozoya.
El lunes 23 de octubre, Mexicanos Contra la Corrupción la Impunidad (MCCI) dieron a conocer en una investigación que al menos tres depósitos de 500 mil, 510 mil y 490 mil dólares se realizaron los días 23 de mayo, 30 de mayo y 8 de junio de 2012 (es decir, antes de las elecciones del 2 de julio) en una cuenta off shore a una empresa llamada Latin America Asia Capita, con sede en las islas Virgenes, uno de los paraísos fiscales del Caribe. Esta cuenta, señalan los testigos del caso, fue el vínculo con el ex director de PEMEX y con la campaña presidencial.
Nieto Castillo estaba a punto de solicitar el congelamiento de las cuentas de Lozoya cuando, repentinamente, y usando de excusa la entrevista que dio, la PGR lo destituyó de su cargo.
Ahora, tras la detención de Lozoya, es claro que el expresidente será llamado a declarar durante el juicio, toda vez que su abogado ya indicó que su cliente dará los nombres de quienes estuvieron involucrados en la trama de corrupción que le generaron millonarios recursos a Peña Nieto para su campaña electoral de 2012.