Fueron meses, semanas, de intensas negociaciones, jaloneos, acusaciones mutuas, cables diplomáticos, reuniones de alto nivel, pero al final de cuentas, el gobierno de Andrés Manuel López Obrador se dejó torcer el brazo y autorizó la entrada de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos a territorio nacional. No lo hizo porque quiso ni porque pudo, sino porque fue doblegado por las circunstancias que envuelven en una nube de violencia a distintas regiones del país, puntos estratégicos que actualmente los cárteles han convertido en su teatro de guerra y que amenazan con extenderse a más geografía: Zacatecas, Jalisco, Michoacán, Guerrero, Sonora y Tijuana. De no aplicarse un urgente plan, también el estado corre el riesgo de estallar con otro frente. Con los últimos operativos que han sacudido la logística de los cárteles Jalisco Nueva Generación y de Sinaloa, nadie pone en duda que la DEA empieza a sacudir el tan alborotado panal de avispas, y que, el panorama policiaco militar y de seguridad para el próximo año… no resulta nada halagador.
Por Redacción Deprimera Noticias
La orden llegó de Estados Unidos. De la DEA. Tienen una lista de varios personajes del Mayo Zambada, se filtró el comentario en las filas del Cártel de Sinaloa luego de la aprehensión de Armando Bátiz, El Ingeniero, uno de los proveedores y fabricantes de fentanilo más grandes de los últimos años y cuya producción abastecía las redes de distribución hacia varias ciudades americanas.
Con la neutralización de esta fuente del opiáceo sintético, se cortó apenas una de las cabezas de la hidra con las que inundan las principales ciudades norteamericanas, pero también sacudió a la cúpula al obtener información que los gringos volvían a trabajar.
Y es que la forma en que se ejecutó el operativo para la captura de El Ingeniero y la de algunos de sus colaboradores fue impecable, con información de primera mano y un despliegue silencioso que no alcanzó a ser detectado por ningún halcón de la zona. La operación quirúrgica se enfocó en el Campestre El Álamo, el residencial Valencia y en algunos puntos de Mazatlán de los que no se tuvo noticia.
Tras la vinculación a proceso que otorgó un juez de control a Armando Bátiz, se logró saber que la Fiscalía General de la República (FGR) y los agentes investigadores no llevaban un día, sino que todo lo fueron planeando al estilo de la DEA con hombres encubiertos que vigilaron los movimientos de los traficantes en esa zona: número de vehículos, placas, rostros, residencias, etcétera.
Posterior al arresto de El Ingeniero, la FGR y las Fuerzas Armadas Mexicanas, –pues la DEA no opera de manera visible– en Culiacán han continuado los operativos con golpes efectivos en el decomiso de más pastillas de fentanilo y cocaína.
En un domicilio de la colonia Lázaro Cárdenas, el 24 de noviembre pasado, fueron arrestados cuatro hombres, y en el interior encontraron bolsas con pastillas de fentanilo y cocaína. Al día siguiente, en la colonia Guadalupe, también en otra residencia que incluso el narco usaba como taller para colocar dobles fondos a vehículos, fueron decomisados más de 100 kilos de cocaína en paquetes finamente confeccionados.
De acuerdo con el reporte oficial, durante aquella tarde, militares y elementos de la FGR realizaron un despliegue por la calle Río Culiacán esquina con Donato Guerra y aseguraron un inmueble, el cual fue resguardado hasta que llegó la orden de cateo al juez correspondiente.
Peritos de la FGR y agentes de la Policía Federal Ministerial cumplimentaron el mandato judicial y aseguraron 99 paquetes que dieron un peso de 107.7 kilogramos de cocaína, además del inmueble y dos vehículos.
Con estas operaciones, y sabiendo que la DEA trabaja de nueva cuenta en coordinación con las autoridades mexicanas, personajes del crimen organizado optaron por pasar a un bajo perfil, comenzando a ocultar laboratorios y mercancía que se encontraba a la vista e incluso eliminando redes de contacto telefónico y de servicios de mensajería instantánea.
Datos filtrados señalen que el gobierno mexicano y gringo lograron obtener un caudal de información de los equipos telefónicos de El Ingeniero, quien actualmente se encuentra bajo proceso por delitos relacionados al tráfico de fentanilo.
Incluso esta situación se vio enrarecida por una espiral de violencia que cobró la vida de varias personas en el municipio, incluyendo a presuntos atracadores de carretera en Navolato.
Jalisco, el otro frente de la DEA
Fue el 15 de noviembre cuando el Ejército, la FGR y elementos del Centro Nacional de Inteligencia detuvieron a Rosalinda González Valencia en el municipio de Zapopan, tres años después de haber sido dejada en libertad, acusada nuevamente de delincuencia organizada.
Este hecho ocurrió luego de que días antes la DEA había logrado la extradición de uno de sus hermanos, José González Valencia, detenido en Brasil. El día en que fue arrestada la esposa de El Mencho y se aseguraba que iban por una de sus hijas, Laisha Michelle, dos elementos de la Secretaría de Marina fueron secuestrados por las huestes de Nemesio, y dejaron en libertad días después lejos de la zona.
Sin embargo, en Guadalajara y Zapopan siguieron días turbios que desembocaron en el mega operativo encabezado por la Marina y Guardia Nacional, y que dio como resultado la detención de tres hombres de Nemesio Oseguera Cervantes. De acuerdo con reportes de medios digitales, todo comenzó durante la noche del 1 de diciembre cuando un helicóptero militar comenzó a surcar los cielos de la zona metropolitana.
El operativo estaba equipado con helicópteros artillados, tanquetas y decenas de camionetas, los cuales irrumpieron en varias colonias del municipio de Zapopan.
Los elementos prohibieron el paso a los vecinos que habitan en la calle de Orión entre Osa Mayor y Carneros, del sector en mención. No ofrecieron mayores explicaciones. Mientras los helicópteros surcaban el cielo, elementos de la Secretaría de Marina y la Guardia Nacional, tomaban una torre de departamentos, estacionándose, cerca de la banqueta y tomando posición de la zona.
Al final, reportaron el arresto de tres hombres, en uno de los videos se observa cómo los marinos someten a puntapiés a una persona en una cochera de una residencia. Del Mencho no se supo nada más.
Justo también en esos días el gobierno de Andrés Manuel López Obrador lanzó un operativo con el despliegue de casi cuatro mil elementos en Zacatecas, pues en esta región pelean a muerte los cárteles de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación, con consecuencias violentas inéditas para ese punto, y además con la amenaza de extenderse a los estados vecinos.
Este martes 7 de diciembre, desde el pódium de La Mañanera, el presidente reveló que también se activará el plan militar en Tijuana, para tratar de contrarrestar la violencia endémica en la ciudad fronteriza, peleada también por el Cártel de Sinaloa y sus enemigos.Además, actualmente existe el frente de Mexicali, San Luis Río Colorado, Caborca y Sonoyta, cuya violencia se teme que retorne a Sinaloa en los próximos meses.
DEA en tierra de nadie
Desde que entró la administración de Andrés Manuel López Obrador, comenzó a retirar las operaciones colaborativas de la DEA con las fuerzas armadas del país, por lo que Washington comenzó a cabildear para que los trabajos contra el crimen organizado no se trabaran a lo largo del sexenio.
Sin embargo, apelando al patriotismo de la soberanía nacional, la Cuarta Transformación terminó por desmantelar los grupos de trabajo bilateral, mismos que habían conseguido la captura de El Chapo Guzmán, Vicente Carrillo Fuentes, La Tuta, Héctor Beltrán Leyva, Fernando Arellano Sánchez, entre otros grandes capos del narcotráfico mexicano.
Para López Obrador, fue más importante mantener su estrategia de los programas sociales para arrebatar activos al crimen organizado, pero en realidad, la problemática continuó creciendo a lo largo de estos años de su gobierno. Siempre bajo el argumento que detener cabezas no abona al fin de los cárteles.
Pero vino la presión de Estados Unidos, cuando vio que allende sus fronteras comenzaron a llegar inéditos embarques de metanfetamina y fentanilo, drogas que inundaron sus ciudades y provocan miles de muertos a lo largo y ancho del país.
Incluso la detención del general Salvador Cienfuegos Zepeda, señalado de trabajar con el grupo criminal de Los Hache en Nayarit, fue vista por Andrés Manuel como una reacción de la DEA ante su negativa a dejarlos participar en las operaciones de seguridad en México.
Distanciados por el escándalo Cienfuegos, el gobierno mexicano y el Departamento de Justicia no supieron transitar de la forma más diplomática, y junto con diputados y senadores, el presidente estableció todo un protocolo legal en la Ley Nacional de Seguridad para burocratizar el trabajo de las agencias extranjeras en suelo nacional.
Junto con esto, canceló visas a los agentes antidrogas y dejó de trabajar en operativos de inteligencia para capturar a capos de la droga. El país se sumergió en un torbellino de violencia.
Sin embargo, los trabajos encubiertos de la Agencia Antidrogas no dejaron de incidir, gracias a la información de campo que conseguían recuperar, asestaron varios decomisos de metanfetaminas y fentanilo, como el embarque detenido en Topolobampo en enero de 2021 pasado.
La presión del Departamento de Justicia y de Estado se hizo más visible para mayo, pero meses más tarde, funcionarios consiguieron una reunión de alto nivel en la Ciudad de México, a la cual asistió el secretario de Estado Antony Blinken, el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, y el fiscal general estadounidense Merrick Garland.
De la reunión con AMLO y su gabinete de seguridad, resultó el Entendimiento Bicentenario, que cancelaba la anquilosada Iniciativa Mérida y lograba que Estados Unidos revisara su ley armamentística y de prevención del consumo de drogas.
En ese escenario, el gobierno mexicano permitió la entrega de visas diplomáticas a los agentes antidrogas que ahora se han sumado a las operaciones en las distintas regiones del país, incluyendo Sinaloa.
Se confirma
Fue el pasado 30 de noviembre cuando Todd Robinson, subsecretario de Estado para Narcóticos Internacionales de Estados Unidos, reveló que la Secretaría de Relaciones Exteriores había aprobado visas para sus agentes de control de drogas
“Ellos recién accedieron a más visas para agentes de la DEA en México”, dijo Robinson al comparecer ante el Comité de Relaciones Exteriores del Senado estadounidense. Además, agregó que el Gobierno encabezado por el presidente López Obrador accedió a trabajar más de cerca con agencias de Estados Unidos.
Según el anuncio original, ambos gobiernos deberían dar a conocer, antes del miércoles 1 de diciembre, un grupo de acciones contra el crimen organizado, enfocado en la reducción de la violencia, la protección de la salud y que deje de privilegiar sólo detener a los líderes de los cárteles del narcotráfico.
“Ya hemos visto progreso en esa área en términos de cooperación más cercana, mejor acceso para agentes de nuestras agencias de aplicación de la ley”, dijo, por su parte, el subsecretario de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental, Brian Nichols, quien también participó en la misma audiencia en el Comité de Relaciones Exteriores del Senado estadounidense.
El orgullo de AMLO
Cuestionado en una conferencia mañanera, el presidente confirmó la autorización de visas, pero matizó al decir que era conforme a la nueva legislación regulada por la Ley Nacional de Seguridad, y de paso aseguró que “no habrá nada oculto”.
"Que se dé a conocer la ley que ya se reformó para que todos sepamos. Nada oculto, nada hecho a espaldas de la gente, como era antes, que los mexicanos no sabían cuántos agentes del extranjero operaban en el país; hasta acompañaban en los operativos a los elementos de las fuerzas armadas y de las policías, hasta declaraban los embajadores de Estados Unidos”, expresó el mandatario.
Recalcó que no debe haber “injerencismos”, pero “sí tenemos que cooperar, eso es otra cosa, tenemos que actuar de manera conjunta, y lo estamos haciendo con las agencias, con el Departamento de Estado, con el gobierno de Estados Unidos, porque, pues tenemos tres mil 180 kilómetros de frontera y somos vecinos, y tiene que haber cooperación, pero con respeto a nuestras soberanías”.
Dijo que antes los elementos extranjeros, “entraban como Andrés por su casa”, pero ese tipo de acciones no se repetirán, “porque es nuestra soberanía que tenemos que proteger. Y tenemos que actuar con respeto, pero con apego al ordenamiento legal”.
Datos obtenidos de fuentes de seguridad indican que los agentes ya trabajan aportando información de inteligencia para continuar con operativos contra los cárteles, en especial los de Sinaloa y el de Jalisco Nueva Generación.